Un regalo de Sergio Astorga

jueves, 3 de febrero de 2011

Doble sinestesia para un Temporal antojadizo

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Regalo de Sergio Astorga titulado "Variaciones". ¿A que es chulo?




       
                                                                                  Para Sergio el abarrotero            






Gracias a la gestión de mi intermediario financiero alemán, llegó por Navidad a casa para contrarrestar tanta cena familiar no deseada. Se desglosó en regalo de Reyes para Javier y Ángel, mis mejores amigos. Y una tercera parte se quedó a vivir aquí, en un estante de mi cuarto de trabajo, entre un libro titulado "Ciudades del México antiguo: el discurso de la piedra" (lo que son las cosas) y un texto renacentista del padre Sigüenza sobre el monasterio de El Escorial. Y aquí sigue. Se alimenta de poco aunque puede que eche de menos su abarrote. Eso sí, le han crecido en el lomo estilizado unas a modo de orejas diminutas con las que se asoma continuamente (curioso que es) a escuchar la música del día. Ha desarrollado al respecto ciertas preferencias pero me van a permitir que no las diga. Un secreto a dos jamás debe romperse... Se helaría.

Y de horas y horas compartidas sin decir una sola palabra ha surgido un intercambio feroz de verbos, meses y adjetivos. Me vigila y me guarda. Lo abro con frecuencia y me renueva. Por él y por el sentido que le ha dado a ciertos giros vitales, ha ido surgiendo despacito esta sinestesia doble que lo único que tuvo de voluntario fue no brotar de las acuarelas firmes o difusas del autor de sus hojas, sino de las imágenes y las notas de otros. Para ensamblarse en un tango imperfecto, vívido y vivido, al ritmo de figuras geométricas de un ruso soñador y visionario o en la locura de  poema austríaco triste y alunado, arrebatado por el vértigo vital de un malagueño clásico.

Permitan que se haga polizón por los rincones. Déjenle formar parte de su entorno sobre el espacio breve de su mesa de noche o, ya más tarde, emparedado vivo entre piedras ilustres suplicante de un nocturno polaco y sanador. Ábranle las puertas, hagan como que no han visto que se cuela por la rendija oscura de los deseos aún no cumplidos. Para contradecirlo. Arrúllenlo en el frío de febrero y pídanle que les deje asomarse a sus abismos de papel entintado mientras afuera el viento venga afectos nada templados y aun así escurridizos. Paséenlo, sírvanse de él. Incluso desmenúcenlo o háganlo trizas si es preciso, pero que no se escape. Que no se les escape. Que no se nos escape. Porque entonces el antojo se instalaría en nuestro ánimo solo, sólo para  recordarnos que nunca debimos dejar pasar de largo el Temporal.




El negro

El negro es una exclamación
 de flama en el ritual del ojo.
Perfila los contornos de las sombras;
construye mundos triángulos esferas.
La línea es el bastón
y epitafio de las formas.
Día tras día inventa semejanzas,
añade otra inicial al calendario.
El negro es una zanja para el viento,
se impregna obstinado sobre el plano, 
deja cicatriz, ya no es reflejo.
Se pierde el habla.
el ojo inflama.
El negro brama cuando exhala.
    Temporal - Sergio Astorga          

                          

Wassily Kandinsky (1866-1944). Composición VII (1923). Museo Guggenheim de NY.



A.Schoenberg (1874-1951)  - Farben (Colores). Cinco piezas para orquesta, op. 16 nº3. (1909) wie ein hauch. Transcripción para coro mixto a capella por Frank Krawczyk en 2002. Coro de cámara Accentus. Dir.: Laurence Equilbey. Naïve, 2005











No es vano

Hoy será un día largo.
Tiempo de sol
para inventar otro presente.
Tiempo con patio circular.
Con barro.
Con granito.
Hoy habrá reflejos 
sobre el agua de sal
de nuestra cara
y manos hambrientas
de voces amorosas arañando la luz hasta matarla.
Temporal - Sergio Astorga      



P.Ruiz Picasso (1881-1973). Dos mujeres  corriendo en la playa (1922) - Imagen invertida. 
Museo Picasso de París.  
             

A.Schnittke (1934-1998). Tango. Agony (suite para concerto). Orquesta Sinfónica de la Radio y la Televisión de Berlín. Dir.: Frank Strobel. CPO, 1990.


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24 comentarios:

anarkasis dijo...

(tengo que cambiar el enlace, me lo apunto otra vez)

Bueno, el susurro del primer tema, me ha hecho entrar en el sistema operativo, pensé que se le había jodío el sonido al ordenata, está tan bajo que se necesitan cascos para apreciarlo,.
El tango, chachi, mientra cocineo le troncho la espalda a la barra de pan, y sigo , siendo tan bien recomendado, el sergio ese lo voy a tener que traer a la mía estantería, de momento me lo apunto.
Un fuerte abrazo chiqui, y recuerdos a su servidor.

Gemma dijo...

Qué sinestesia más hermosa, Condesa. Veo que -para variar- coincidimos en gustos y que has optado por escoger también "No es vano", una pieza con la reverberación del eco, atrayente. Pero es que el tango me parece tan adecuado y oportuno...
Abrazos desde un Berlín que ya empieza -qué bien- a mostrarse algo más luminoso

Gemma dijo...

PS: Se me olvidó comentarte que no puedo ver los vídeos desde aquí. Si quieres molestarte en mandármelos, los veré encantada. Pero si no te va bien, descuida que en menos de 15 días me planto en España y los veo lo mismo... Besos para ti y tu costilla :-)

Gemma dijo...

PS2: De nuevo se me olvidó -qué cabeza la mía- felicitarla como es debido por haber decidido prolongar sus Variaciones.
Hale, creo que por hoy, eso es todo.

J. G Centeno dijo...

Nos felicitamos, Nos se refiere al otomano y a mí mismo aunque bien pudiera ser un uso mayestático, algo que tengo merecido por edad, dignidad y gobierno, de que nos vuelva a alegrar la vida con sinestesias, antítesis y antónimo de anestesias, que sirven para aguzar sentidos y despertar sensaciones. Dicho lo cual: ¡Hala Madrid!

Freia dijo...

Anarkasis

Jajaja, querida. Para eso están las rayitas de volumen del "tocata". Me alegra que disfrutara Vd. de ese tango tan apasionado con la barra de pan, pero confío en que no dejara sin sustento nocturno a sus sobrinas. Déles de comer carbohidratos a las criaturas, querida, que están en edad de crecer y de desgaste de todo tipo.
Y sí, apúntese el texto de Sergio y los enlaces para adquirirlo (que están debajo de la foto de portada). Si no pudiera conseguirlo, yo le puedo hacer un préstamo del mismo a precio módico: un café en el Museo del Prado.
Un abrazo querida. Bien fuerte.

Gemma

Vaya, mi querida MegaMaga, ahora que sale un poquito el sol por los Berlines, Vd. se nos vuelve a Barna. No me extraña que solo fotografíe carámbanos, caramba.
Sí, me gustaron mucho varios poemas, pero estos dos eran especiales. El primero porque me vino inmediatamente a la cabeza Kandinsky y, acto seguido, esa pieza de Schoenberg que me enamora. El segundo, tienes toda la razón, por ese ritmo tan especial del poema.
En cuanto pueda me meto en el Picassa y le mando un enlace, palabrita.

Ardiendo en deseos de que vuelva ya Vd. a los mediterráneos, la despido con un abrazo especialísimo a su costilla y montones de besos para Vd., querida.

JGCenteno

Mi muy queridos Javier y el otomano. Me complace muchísimo su dúplice presencia. Espero que ya no tenga problemas de carga de Variaciones, gracias a que éstas han variado. Le han faltado a Vds. las anastasias y las atanasias, pero ni siquiera Vds. o su Yo Mayestático, son perfectos.

Por supuesto, ¡Hala Madrid! Ahora más que nunca.

NáN dijo...

"Temporal" da un tono litúrgico, como "misal", al paso del tiempo. Y en verdad os digo que nada merece más tratamiento que su paso. Woody Allen, en una película, al hablar de la vida dijo que era como el chiste: dos mujeres hablan de un cóctel en un hotel al que van a ir. Una de ellas dice que allí la comida es horrible. La segunda le da la razón y añade: "Y además, tan escasa".

Hermosas músicas (y como le pasó a Anarkasis, subí el volumen hasta que los ruidos petaban y la música quedaba de fondo). Por criticar algo, vamos.

Freia dijo...

Nano querido. Siempre me gustó mucho la palabra temporal. Fonéticamente se desliza desde la oclusiva hasta la L final que se queda vibrando. Otra de las razones por las que me gusta tanto es por su significados tan distintos aunque provengan de una misma raíz latina y por esa apropiación del término por la climatología. A la acepción que Vd. apunta le uno yo la de barredor, agitador y limpiador del aire. Siempre lo he asimilado a un concepto de purificación y empezar de nuevo por muchos destrozos que ocasione previamente.
Y de ambos temporales trata el libro.
Por lo que respecta al sonido, jajaja, a lo mejor es que les ha sorprendido que Schoenberg no era tan "chirriante" como dicen las malas lenguas. Yo últimamente solo escucho su música y me tiene fascinada por lo hermosa.
Un abrazo bien grande, Nano y, por la cuenta que le trae, no baile el tango con nuestra querida Anarkasis.

Martine dijo...

Hoy será un día largo...Más lo fueron los anteriores.. ;)

Hoy es un día esperado, lo sabes, anhelado por mí..¡ pero ya llegó!
Y me deleito con esta espectacular entrada..¡Qué grande Sergio en todo lo que hace! ¡Y qué maravillas has logrado ma Chérie! Voy a llenarme la mente, los oídos y los ojos.. lo necesito .. y que mejor lugar y compañía que este nuevo Palacio-Jardín de las delicias..

Mille et un bisous, ma Jolie Petite Comtesse, je te tutoie, tu en m'en veux pas, n'est-ce pas? Je suis heureuse, d'être là..Heureuse tout court ;)

Freia dijo...

Bonsoir Martine. Espero que el día haya sido espléndidamente largo.
Jajaja, Nómada. Los méritos que vayan para Sergio, que yo, como siempre, me dedico a cocinar y maridar obras de arte siempre ajenas para alimentar oídos y ojos ajenos y muy especialmente los propios.
Je vous embrasse

Isabel dijo...

¡Qué bien hablas de aquello que te gusta! Tanto que te seguimos a destancia y disfrutamos con tus gustos.

Ese poema al no color me ha encantado.

Un fuerte abrazo.

fra miquel dijo...

Lo se, debería estar haciendo cosas mas urgentes, pero no podía pasar un día mas sin entrar en las Variaciones.
Una vez aquí, y leído el texto y los poemas me quedo sin palabras... Sólo unos instantes. No me salen las palabras. Y es que soy de ciencias ;o) Cosa que no me priva de sentir placer en la lectura de dichos escritos y en la audición de la música que los acompaña. (También me ha ocurrido como a anarkasis con el volumen)
Besos y abrazos

NáN dijo...

Un tango, quizá no me convenga, pero podemos sentarnos en un tú y yo y hablar de las músicas que usted pone. Y todo a media luz.

Freia dijo...

Perdón por el retraso. La semana fue larga.

Isabel

Jajaja, Isabel. Yo creo que cuando algo nos entusiasma, nos volcamos en ello con todas nuestras ganas y una dedicación especial.
A mí me encanta esa forma sencilla de contar con cuatro trazos que tú tienes y esa facilidad y arte para dar en el clavo.
A mí me también me gustó especialmente el poema dedicado al negro y la primera vez que lo leí, se me vino inmediatamente a la cabeza el cuadro de Kandinsky.

Un abrazo muy fuerte, Isabel

Fra Miquel

Pater, me encantaría haber podido hacer lo que Vd. Poder escaparme a ratillos y pasarme por otros blog queridos y que echo de menos. A ver si este fin de semana recupero el trabajo perdido.

Parece que Schoenberg no se escuchaba todo lo que era necesario, pero creo que eso acabará solucionándose. Y quizá tanto que acabarán Vds. decir que no quieren escucharlo más. No ya en serio, espero que eso no ocurra. Yo no hago más que escuchar su música y cada día me fascina más.
A ver si tengo tiempo y consigo contagiarles mi entusiasmo. Estoy segura de que entre todos, romperemos muchos tópicos acerca del austríaco.

Un abrazo lleno de narcisos, pater

Nàn

¡Qué párrafo más sugerente! No hay nada que me pueda apetecer más que una charla tranquila sobre música y literatura con Vd. Y con crepúsculo interior.

Un abrazo suave,

Maribel Romero dijo...

Maravilloso, realmente fantástico. Todo un dechado de buen gusto para agasajar al Temporal.
Felicidades.

Maribel Romero.

Freia dijo...

Maribel, bienvenida al salón dieciochesco de esta vieja condesa con excesivas ínfulas.
Coincidimos, por fortuna, desde hace ya tiempo en el abarrote de Sergio y puede que ahora coincidamos también en nuestras bitácoras. Ahora me voy para la suya.

Gracias por sus palabras y de nuevo bienvenida.

Librería de Mujeres Canarias dijo...

Bellísima sinestesia, admirada Condesita. Brutal en el buen gusto, la luminosidad, el detalle. ¡Impresionante!
A sus pies, como corresponde, quedo.
Y plena de gratitud por ser la entrada para un hombre que tanto y tan bien quiero.

Freia dijo...

Buenas tardes, Siempreconhistorias.

Conocí a Sergio a través de Gemma y gracias a Vd. No lo olvido nunca. En su abarrote he degustado, me he escondido o refugiado, he sido serena y tranquila. Adoro esas cicatrices deseosas de un blog abierto, franco y con colores bailantes.
Lo bueno/malo de los sinestésicos es que no hacemos nada porque se formen imágenes, olores o música en nuestra cabeza. Es independiente de que uno lo quiera o no. Por eso no tiene mayor mérito. Una vez que surge, no hay más que seguir tirando del hilo y una cosa acaba llevando a la otra.

Nada de a sus pies. Un abrazo contento de tenerla por aquí. Espero que la nueva casa le guste.
Siempre estará a sus disposición para disparatar o contar historias.

Sergio Astorga dijo...

Querida Condesa, ya con la espiga de la discreción clavada, ya a la intemperie, en el silencio de la harina con la que se hace el pan, puedo escribir estas notas de gratitud hacia la flor y el germen. Como te digo, ya con el sosiego, ya que todos los comentarios han pasado y al no querer estar expuesto en demasía, puedo ahora tranquilo, echar al vuelo las campanas, y quitar esas máscaras nacidas del frio solitario.

Ha sido la tuya una lectura fina, poética, sensible y una espesa alegría me envuelve y no sé dónde poner la copa de agua o de vino.

Es muy angosta y rica la relación que se afinca entre el lector de poesía y el que escribe. Son patrimonios del aire y de las sinestesias o de las evocaciones que desembocan en estos ríos de palabras que van al mar o al desierto. Gracias por dar morada a mis versos y dar a mis dibujos guarida.

Al tamaño de esta magnitud de tus palabras y de tus memoriosos arrecifes musicales, quiero dejarte un torrencial saludo y una enredadera vital en tus salones.

Abrazo sonoro de intemporales gracias.
Sergio Astorga

Freia dijo...

Querido Sergio.

Ahora que ya pasó el tiempo de los comentarios en esta entrada, le confesaré que su Temporal todavía viaja algunos días desde el estante a la mesilla de noche para releer algunos poemas. Me gustan especialmente los de junio.
Pero debo repetirle que al leer por vez primera los dos que aparecen en esta entrada las imágenes surgieron inmediatamente, al igual que el tango. La de Schönberg fue el cuadro de Kandisky, visto ya con más detenimiento, el que la trajo.

Siempre, querido Sergio, habrá un hueco muy especial en este salón para los textos especialísimos de unos cuantos de Vds. y no cito nombres no sea que alguno se me olvide.

Soy yo quien le da las gracias por el enriquecimiento.

Un abrazo sereno y discreto.

María Eugenia Mendoza dijo...

Hola Freia:
Cuando Sergio pensó que todos los comentarios habían pasado, éjele que todavía faltaba uno de una de sus admiradoras.
Esta entrada, dedicada a Temporal, al poeta, a la música que acompaña a la obra, al arte, es sencillamente hermosa y obliga a releer cada poema y cada imagen.
Va un abrazo cariñoso.

Freia dijo...

María Eugenia

En primer lugar, bienvenida a esta casa. En segundo, disculpe por favor el retraso. Ando últimamente con poco tiempo para trastear por la blogosfera.
Yo tuve ocasión de conocer su blog a través de esa magnífica acuarela de Sergio con su aldea rodeada y protegida de letras. Me encantó la obra de don Sergio y su blog.
Con su permiso la enlazo a mis blogs amigos.
Su comentario queda pues como una confidencia a dos. Como habrá leído algo más arriba, las imágenes y la músicas vinieron prácticamente solas después de leer los poemas del dueño del abarrote. Celebro que le hayan gustado.

Un abrazo también cariñoso para Vd. y confío en que poco a poco vayamos conociéndonos cada vez mas.

Sergio Astorga dijo...

Mi querida Condesa, ese tango me enloquece, aquí me tiene gosando de nuevo.

Un abrazo Agony.
Sergio Astorga

Freia dijo...

Mi querido abarrotero. Me ocurre lo mismo con ese tango. Desde que lo escuché la primera vez me encandila, igual que con otro llamado Claude.
Por cierto, sigo debiéndole una versión aniversario de las Variaciones, ¿no?

Un abrazo brevemente tanguista.